Siete hermanas se reúnen para el funeral de una de ellas y en ese encuentro emergen recuerdos, culpas y resentimientos que dejaron heridas por siempre abiertas. Las hermanas recuerdan la primera vez que vieron el mar, pero también la tragedia que marcó ese día. Rememoran, burlándose, los gestos de un padre maltratador y frustrado y de una madre idealizada.
Se miran, se ríen, se insultan, se golpean, en una liturgia familiar repetida a lo largo de los años. No ha cambiado nada. La vida y la muerte cohabitan en esa casa. El luto permanente es una metáfora de sus vidas, marcadas por la pobreza y el dolor.
Un retrato descarnado y poético sobre los vínculos familiares, donde el humor y la tragedia se entrelazan en una danza ancestral de amor y rencor. Una obra de Emma Dante que explora las raíces más profundas de lo que nos une y nos separa como familia.